FECHA DE LA EXPERIENCIA: reciente
NOMBRE DE LA ESCORT: Judith
NOMBRE DE LA AGENCIA/PISO/CLUB: Belladona
WEB: http://www.belladonagirls.com/barcelona/
DIRECCIÓN: quedamos en el suites barcelona
TELÉFONO DE CONTACTO: el de la web
TARIFAS APLICADAS: según tarifario
DETALLES DE LA AGENCIA/PISO/CLUB: primera vez que visito el suites barcelona: todo nuevo y bién decorado, con ducha dentro, oiga, con radio , su ubicación es perfecta, 15 minutos a pie del despacho

DETALLES DE LA ESCORT: belleza juvenil con genética hispánica mejorada, pechos increíbles, cintura de avispa con acabado armónico, risueña y con fantástico sentido del humor, barcelonesa
VALORACION ESTETICA: 9,5
VALORACI0N DEl SERVICO: 9,5 -porque si pongo 10 luego mi criticáis-

Que chica más risueña, guapa. Sus facciones te invitan a sonreir, te cae bién. Cuando habla cuida su tono, su acento, y proporciona una conversación entretenida. Quedamos en el suites y llegué con 3 o 4 minutos de retraso, cuando llegué pregunté por élla, ya estaba allí, y me guiaron hasta la habitación. Al cabo de un instante llegó Judith, alta, guapa, preciosa, morena, esbelta. Con voz aterciopelada me ofreció el paraguas que acababa de dejarme en la recepción. Primer triple para Judith

Conversación, comentarios, alguna broma sobre el paraguas. Noto mi tensión que yo intentaba aliviar con humor, pero viendo a esa preciosa chica delante mío, hablando dulcemente, poco podía hacer. Entre más bromas sobre el posible tamaño de mis atributos, pasé a la ducha mientras Judith se acomodaba, dejando ver un precioso conjunto de lencería.

Ya en la cama sus besos y su calor fueron penetrando, y tomó la iniciativa hacia un francés excelente al que me costó resistirme, esa sensación, que no había tenido hacía tiempo, de que podía durar poco me sobrevenía mientras com mi mano acaraciaba los maravillosos recovecos que Judith tiene entre sus piernas, a lado y lado de su sexo, al rato notaba su calor y humedad en la punta de mis dedos per encima de sus braguitas primero, después directamente. Le ofreci recíproca práctica a Judith i hundí mi cara entre sus piernas, me levantaba un poco y admiraba, separaba los labios de su sexo y de nuevo con avaricia volvía en busca del santo grial, delicioso caballeros. Ahí ya había perdido la noción del tiempo.

Si hay algo que destacaría del físico de Judith són sus labios sensuales, sus excelentes pechos, en su medida, perfectos, tiernos, con aureolas y pezones muy comestibles, y su trasero, de una textura y belleza propios de una joven diosa

Judith decidió cabalgarme, narices, también cabalga bién, bién. Tuve que detener el ritmo un par de veces, mientras esos fantásticos pechos estaban a mi merced, los hundía en mi boca mientras mis manos apretaban sus nalgas. Todo aquél arsenal del placer me volvía loco.

Finalmente Judith me ofrecio a cuatro una vista y unos envites... recuerdo un momento en que ¡me sentí manoseador! no daba a basto, y me venció, aunque todavía puspuse el alto, disfrutando cada segundo...

Después de la típica conversación entre escort y cliente sobre la profesión escortil, miramos la hora y ya había pasado prácticamente, ¡increíble! me habían parecido 5 minutos... nooooo... Judith me ofreció un masaje, al que yo me negué pidiendo a cambio ser yo el masajista, y así aproveché para agradecer a esa chica su ofrecimiento en aquella hora, y pude también, me pillaste, acariciarla hasta el último minuto.

El resto del día no podía dejar de oler aún en mis manos, el dulce olor de la crema de masaje y de Judith, una evocación constante del tiempo pasado.

Judith, me cazaste.