Anna mi Khaleesi

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Barcelona

Apartamento por horas	7
Duración	60 minutos
Precio	0€
Pecho	Natural
Fumadora	No lo sé
Besos	Besa con lengua
Francés	Sin hasta el final
Griego	No lo sé

En una noche fría y entrada casi la medianoche, cuando se trata de acostarse caliente, seguramente una de las compañeras que uno querría tener al lado en la cama sería Anna.

 

Un pobre hombre como yo afortunado con un premio que se convirtió en una experiencia de tiernos retozos. Mi elección en la agencia fue después de preguntar por alguna cortesana que fuera dulce, suave, tierna y, con aptitudes para el francés completo, y entres las cortesanas que había en la lista propuesta, me decidí por Anna.

 

Anna estaba de descanso hasta esta semana y aunque tarde, felizmente cruzamos agendas para encontrarnos en el Suites Barcelona de Rambla con Provenza. Local adecuado para un retozo, algo mas holgadas las habitaciones y claramente una iluminación más calida favorecerían el ambiente. 

 

Cuando entré en la habitación Anna había llegado hacía escasos minutos, Anna es muy guapa, y cuando quiero decir muy es muuuuy guapa: ojos grandes muy bonitos, nariz perfecta, labios generosos, vamos, un canon de belleza, una sonrisa de Anna te deja anestesiado. Luce un estilo de peinado y llok a lo Khaleesi (con el pelo más corto), ojos castaños, mas guapa que la Targaryen, muy guapa, una modelo de revista. Nos presentamos y mi primera impresión fue de chica más bien calladita y modosita, no entablamos ninguna conversación que consiguiera aún romper el hielo, entre Anna que es más bien tímida y yo que, bueno para que contaros, estaba entre anonadado y algo nervioso por la belleza y la juventud de mi cortesana, articulamos pocas palabras, acordamos eso sí una ducha conjunta, y a tal efecto Anna se fue desnudando y regalándome aún más con una figura y unas curvas, comedidas, sensuales, sexuales, eróticas, turgentes, de piel de Kalesi... pasamos a la ducha, y se rompió el hielo, y se evaporó!  Besos suaves, roces, roces absolutamente lujuriosos, despacio, suave, siempre tierna, gloriosa. Nos trasladamos a la cama donde el festival de besos subió en intensidad, y despacio, recorriendo su anatomía acabé con mis labios entre sus piernas, bendita gloria caballeros, bendita gloria saborear sus labios ya abiertos, notar su excitación con mi lengua, el néctar de los dioses, deseando ya poseerla. Anna hizo lo propio conmigo, y disfrutamos de un 69 vicioso, con temblores incluídos, deseándola otra vez hasta que la hice mía, poseyéndola toda, sintiendo su excitación hasta llegar al clímax, escuchando los gemidos y el sonido de palmadas húmedas contra su pubis mientra me la follaba, a Anna, sublime, preciosa. Sin descanso cambiamos, cucharilla y doggy, espectacular, y como colofón, solo un par de cabalgadas fueron suficientes para dejarme seco y exhausto. Nos despedimos, esperando reencontrarnos, por mi parte sin dudarlo, cuando quiera fundirme con una teen espectacular, fuera de mi alcance, a años luz en el mundo real. Que suerte la mía!