Barcelona
| Apartamento por horas | 7 |
| Duración | 60 minutos |
| Precio | 300€ |
| Pecho | Natural |
| Fumadora | No lo sé |
| Besos | Besa |
| Francés | Sin |
| Griego | No lo sé |
Érase una vez una tarde, concretamente la tarde del día de autos, en la que un servidor estaba sentado con un amigo en una terraza, en plena solana de un bulevar de Bcn. Mientras tanto no dejaban de pasar chicas jóvenes con shorts ajustados, de colores chillones, piernas largas bien torneadas y pechos aparentemente siliconados pero que muy probablemente no lo fueran. A mi amigo, palabras como jaca le parecían expresiones ofensivas para el género femenino, pero yo pensaba que no había palabra mejor para describir semejante desfile de excesos femeninos. Esa tarde el mundo era una jaca; una jaca andante.
Estaba yo dándole vueltas al tema de las jacas cuando de pronto se me encendió la bombilla y me imaginé a la Cavalli, al fin y al cabo poseedora de un apellido equino donde los haya, en italiano eso sí. Además en su anuncio ya me dejaba una pista ":... cada vez que puedo me escapo un fin de semana para ir a montar a caballo." Quizás en esas escapadas estaría el origen de su apellido caballuno y tal vez la madre del cordero.
Nos citamos al anochecer, que es cuando las jacas se convierten en princesas....
Una vez instalado en el picadero para la oportuna monta, apareció una chica bajita, bastante bajita, vamos, un cavallino (no rampante), de pelo liso, castaño claro, y ojos color miel. Si tuviera que destacar algo de su cara sería su prominente nariz y de su cuerpo, su culo. Aunque no es grande, tiene esa forma graciosa y respingona que no permite que pase desapercibido lleve la prenda que lleve. Al verla tuve, por una vez, que dar la razón a un tío mío, funcionario del Departament de Benestar Social, solterón y putero por necesidad, que dada su dilatada experiencia con miles (según él) de mujeres, siempre encontraba una máxima estereotipada para cada clase de hechura femenina. Para la de este supuesto tenía esta: "Qui té un bon nas té un bon detrás".
No creo que haya que andar ventilando las cuestiones íntimas. La experiencia, en el plano estrictamente sexual, la podría calificar de obra simple, de obra vista, sin adornos ni florituras, para nada barroca. Minimalista sí, de máximo orden con los mínimos medios, el todo es más importante que las partes y en este sentido el arte excluye lo innecesario.
"Lo sublime ha de ser siempre grande; lo bello puede ser también pequeño"
E. Kant
