Bueno, a raiz de diferentes informaciones y noticias, me pregunto si el mundo de la prostitución está realmente cambiando.

Antes (años 80' y por lo que leo por alli), el ir de prostitutas particulares consistía en acercarte a una discoteca, donde no se les obligaba a invitar, una especie de 240 pero sin ser tan directos. Ellos hablaban con ellas, y muchas veces tenía conexión con los moteles de alrededor. Estamos hablando de unas 3mil pesetas el servicio. Aún no había miedo al sida y demás.
Luego estaban aquellas citas, donde un amigo de un amigo te pasaba el teléfono de una mujer que tenía contactos con chicas que estudiaban (de verdad, jijij) y/o eran amas de casa. El señor en cuestión contactaba con la señora, le explicaba lo que quería y ella le citaba para presentarle a la señorita. Estos eran los servicios más caros.
Luego, están las chicas que trabajan en la calle, que esas creo que han variado poco. Las hay que tienen al marido en casa rascándose lo que yo me sé, mientras ellas se pasaban las horas en la calle. Otras que tenían una doble vida totalmente anónima, diciendo que iban a limpiar a una casa o cosas así, y las que tenían chulos.
Seguro que habían más modalidades.

En la actualidad, que es prostitución?¿ desde la entrada de la tecnología, internet, la variedad se ha multiplicado. La competencia ha subido muchísimo, y eso hace que se creen más técnicas ingeniosas para captar al cliente. La "mercancía" queda totalmente al descubierto, y claro esto es como tener un móvil de alta tech (perdonad la comparación), porque siempre el de al lado tendrá una versión mejor.
A esto hay que sumarle el hecho del engaño continuo, lo que desencadena una serie de desconfianzas y mentiras que hacen verdaderamente difícil el trabajo. Tanto para ellas como para ellos.
Ahora, aparte de las agencias, con madames, etc.... ahora aparece la figura de la persona que "lleva agendas". Es decir, ella se hace pasar por la escort, informa de los servicios, promete lo que tenga que prometer, y concierta citas. Normalmente son ex escorts que debido a su extensa experiencia, saben que decir en cada momento. El cliente puede o no darse cuenta, depende de la experiencia. Si alguien novato, pues cae. Hasta allí todo correcto (dentro de lo que cabe), pero claro, si la persona al teléfono le dice que sí a esto u otro, y la persona que aparece dice que ni hablar, la situación se vuelve incómoda. El cliente se siente estafado, la chica confiesa que no es ella la del teléfono, poniendo diferentes excusas, "es una amiga, porque yo estaba ocupada, en casa de mis padres, etc".

Esto tiene futuro?¿ pues no. Porque claro, si bien este trabajo es complicadillo, ya que hablamos de dos personas que han de compartir sexo, cosa que es complejo, aunque ya nos suene a cotidiano, imaginaros que hay buen feeling al teléfono y luego todo lo contrario?¿ pues simplemente el rato de sexo compartido y mínimamente satisfactorio deja de existir.

Este trabajo tiene muchos componentes, pero desde luego es importante un físico (no espectacular pero algo atractivo como mínimo), un saber estar, un saber hablar, y un saber detectar y aprovechar el feeling con la otra persona. Y esto, en definitiva solo se puede conseguir de persona a persona, al menos en la prostitución individual. Ninguna otra persona, por más experiencia que tenga podrá transmitir ese "algo" que todas tienen.

Así que, a modo de consejo, para las que se lanzan a la prostitución independiente, es que lo hagan ellas mismas. Que os cansais de coger mil llamadas?¿ pues mala suerte, todo trabajo tiene su esfuerzo. La recompensa a la larga es mucho más satisfactoria.