Tema: Las escorts hacen teatro

Pues no pasa nada... yo no siempre me corro de verdad!



Capi

Soy de los pocos que puede certificar que una escort se ha corrido conmigo.
Era una monada, de lujo, de esas chicas jovencitas con las que soñamos. Me sentía un poco incómodo, porque la persona que me paso su número, un conocido empresario de Barcelona, me advirtió que su rango de clientela oscilaba entre los 35 y 50 años. Y yo, los cincuenta, hace ya muchísimo que los superé.
Pero como dicen que tengo una voz agradable, la engatusé al teléfono, con una descripción física “photopocheada”, señalándole que estaba en el rango de los 45 años.
Cuando me abrió la puerta, fue tal su sorpresa que salió corriendo. Y no ha parado de correr desde entonces.
¡Nunca me he sentido tan hombre! ¡Por fin una que se corre!