A los antros de vicio y perversión(jeje), mejor ir con la cabeza serena...porque si no puedes acabar muy mal y con la cuenta corriente tiritando.
Muy cierto, ademas los cabritos del privee, no se si siguen haciendo, durante un tiempo tiraban de garrafón cosa mala y los efectos al dia siguiente del gin tonic de "lirios" cobrado a precio de bombay saphire eran debastadores.
Hi ha tres coses que un home mai a de trencar... cors, promeses i condons.