Las fotos de la señorita ya era de imaginar que serian falsas. Lo peor de todo es que la sala de masajes, cama incluida, que aparece en el anuncio tampoco existira... me temo que los masajes los da sobre un colchon de esparto...

No obstante, señorita Torres, si la sala es la fotografiada... hagamelo saber del modo que usted prefiera. No me importaria si usted es alta o baja, gorda o delgada, fea o guapa, joven o vieja, catolica o bruja quemada en la hoguera. Me dejaria dar un masaje por cualquiera.