Lo de las tarifas puede llevar a engaño... uno de los peores servicios que he recibido me costó un dineral, la chica era un bellezón, pero salí con la sensación de haber tirado la pasta, en cambio estuve con una señora madura en Cambrils, hace un par de años, una rusa, que por 50€ y sin mirar el reloj, me hizo disfrutar como pocas...
Quizás fue el recuerdo de aquella experiencia que me hizo lanzarme como cuando era novato, y veo que a días sigo siéndolo.