Pues yo frecuentaba una chica muy elegante, fina, bonito cuerpo esbelto, con un piso de primera en el corazón de Barcelona, 400€ por todo el rato que quisieses (4 horas +/-), lencería y ropa super, limpísima, sin tabúes ni prejuicios, sí a todo menos besos en la boca. nos encontrábamos a la 1 y media en su piso y allí preparábamos la comida entre besos y achuchones, comíamos, ducha y a la cama a dar rienda suelta. De entrada me pareció que bebía, aunque el aliento no la delataba, pero en su casa había más alcohol que en un bar de copas. Y la última vez que nos vimos, llevaba tal colocón que ya no sabía dónde tenía la cara y el culo, y perdonad la expresión, pero estaba tan colocada que me fui sin acabar y al cabo de unos días me llamó para excusarse.

No he vuelto a verla, no como "castigo" sino porque me da repelús. Y es catalana, de Barcelona, y tiene familia que sabe a qué se dedica, o sea, está apoyada.

De modo que ya veis, hay de todo en la viña...

Ciao!

Pescanova