Finalmente fui a ver a Laia y me dejé seducir por su piel suave, su pícara juventud y su morbo sin límites. Es una chica que gana cuando la vas conociendo, mejor el segundo encuentro sexual que no el primero, se deja llevar, juega, juguetea contigo, se siente sexy y te hace disfrutar. Hasta su voz por teléfono me pone cachondo...
Bufff!! Si no fuera porque soy un maldito pragmático hasta me enamoraría...
De lo mejorcito...
Saludos.