Señores, ocasionalmente alguna señorita, fuera de bromas, hay poco que relatar. Escuchen la música que iba yo oyendo , pasado de decibelios por la ronda litoral a la vuelta del encuentro, por momentos brutal, en otros religiosa aunque pagana, si les place y dejen volar su imaginación, tratando de adivinar como pueden tres seres acompasar sus sentidos.
http://[url="http://www.youtube.com/watch?v=GD3VsesSBsw"]Carmina Burana ~ O Fortuna | Carl Orff ~ André Rieu[/url]
Ahí tienen Uds los datos relevantes: teléfonos de contacto, descripciones, dirección, tarifas, alguna foto de las implicadas, incluso alguna pincelada ilustrativa de lo erótico del momento. Ambas protagonizan sendas páginas en GirlsBcn y Zaira también se encuentra en el directorio de este foro. ¿Desean Uds una descripción pormenorizada y pornográfica de lo sucedido? Dense el gustazo de vivirlo en primera persona, háganme caso: quiéranse un poquito y sean buenos consigo mismos que ellas serán mejores.
Yo quiero conservar en la memoria que si una o dos horas es poco tiempo con una mujer sobra decir lo que significa el estar con dos. Llega un momento en que faltan manos, bocas, lenguas y más para todo lo que la imaginación dicta. También deseo conservar en el recuerdo el pompis de Zaira apoyado en la mampara transparente de la ducha o su insinuación acariciándose las tetitas para ducharse conmigo o no. Cómo olvidar el primer orgasmo de Shayanne en la boca de Zaira mientras yo la besaba y acariciaba con delectación, ella luchando por encontrar un miembro viril que yo le ocultaba reservándolo para más tarde o las cabalgatas dignas de reyes. Tantos recuerdos... Juegos, juegos eróticos, complicidad compartida. Pues de jugar se trata, hagan juego señoras y señores, hagan sus apuestas y procuren que sea a número ganador.
Valoración de la implicación: No me encontraron suficientemente profesional, debo seguir aprendiendo y practicando para alcanzar los niveles a los que ellas llegan. Esos dulces y también apasionados niveles que son de agradecer.
Valoración final: ¡Ay, lo mejor! Si yo os contara...Si aquellas cuatro paredes hablasen y el ventilador no hubiese apagado los gemidos de las gatitas y los ronroneos mimosos de este gato panza arriba... ¿Y la cama? Gozosa, ella también encajaba los envites estoicamente, devolviéndome a cada segundo para volver a recibir la pelvis que me embestía, primero Zaira, luego Shayanne. Algo que no había hecho nunca a pesar de haber disfrutado ya de varios duplex, follar primero con una y luego con la otra. Lo peor, que tampoco tanto, fue que yo soy monotiro en una hora; ellas a buen seguro hubieran encajado más. No obstante las caricias que me dispensaban mientras conversábamos sobre amor y sexo me llevan a pensar que también estaban contentas al menos.