¿Igualicos? Que más hubieran querido los merengues que Florentino fuera como Laporta. Le pasó la mano por la cara bien pasada, en su primera etapa y a su regreso, la última de Laporta.
En la moción de censura que no prosperó encontramos muchas respuestas a lo que ha pasado después en Can Barça. En cambio, en el Madrid, cuando se convocan las elecciones, no hay alternativa: Florentino o Florentino. No hay elecciones y así les va y así les va a ir.