Como ha dicho Xavi Pascual, ha sido un partido digno de una final. 108-111. Y no sólo de una final, es un marcador NBA.
Navarro ha jugado poco y aun así ha logrado colar 11 puntos, 3 de ellos de una tacada, por un triple. Ese tripe le convierte en el máximo triplista de la Copa del Rey, empatado con Alberto Herreros: 49. Además, con 32 partidos es el jugador que más partidos ha jugado en esta competición y el que más partidos ha ganado: 24. Si disputara la final, se convertiría en el jugador con más finales jugadas: 7.
El 108-111 es la segunda máxima anotación de la historia de la Copa. La máxima es Barça-Madrid del 97, en León, cuando el Barça también ganó al Madrid por 115-110, también en cuartos y también con dos prórrogas (en el Madrid jugaba un tal Pablo Laso. Círculo cerrado). En la tercera máxima anotación también está involucrado el Barça: fue el Barça 110 Joventut 102 de la final de la temporada 1986-87.
El equipo de Xavi Pascual ha logrado el tope de valoración, con 135 puntos, superando así los 133 del Madrid en 1993.
No nos engañemos: Si no ganamos la Copa este partido quedará como una anécdota, pero si el domingo levantamos el trofeo, recordaremos este partidazo durante mucho tiempo.
En semifinales nos espera el equipo anfitrión, que ha aplastado al CAI 88-64. Eso será el sábado.