
Iniciado por
wayrunner
Desde el cuarto al que me pasaron, se veía el cuarto de enfrente con la puerta abierta y una chinita durmiendo en la cama. nadie pensó en cerrar la puerta.
la masajista estuvo más bien fría y remilgada.
El masaje fue muy bueno, pero a la hora de llegar al AQUI TAMBIEN, se subió a la parra pidiendo 20, que al final fueron 12 para hacer un total de 40. Pero era del tipo mirame y no me toques, y ya se sabe que la vista no suelen alegrarla mucho.