Yo hace muuuuchos años disfrutaba mucho de los clubs, me encantaba el rollete típico de esos lugares.
Lo que pasa es que a veces llega un momento en el que ya no te puedes permitir el ir.
Ahora mismo cuando lo pienso, hasta yo me sorprendo de lo tranquilamente que acudía a esos lugares,
incluso a uno que estaba a tres manzanas de mi casa...