He estado con Martina Vega, y la verdad es que la experiencia, sin ser mala del todo, no se ajustó a las expectativas que pude intuir viendo sus fotos y sus tarifas. Con esas tarifas esperas encontrar algo especial y no fue el caso.


A Adriana no tengo el gusto de conocerla, pero la tengo en el punto de mira, espero que no me suceda lo mismo que con Martina, aunque sus tarifas sean algo más razonables.