Es curioso que esta fantasía de irse al catre con dos hembras no sea de aquellas que me tienten. Quizás porque me gusta ir con pausa y más de un objetivo me descentra
Ahora bien, el plan de terminar la tarde con una cena y un buen vino en compañía de dos chicas simpáticas y guapas me ha parecido la mejor manera de completar lo que ha sido una excelente manera de pasar esa tarde de viernes en Barcelona.
Archer