Oiga si uno se echa uno, dos o tres, o los que sean, polvos mágicos a la semana y le gusta contarlo, que lo cuente. Si quiere llevar su diario de hazañas en público, que lo haga, la información nunca sobra. Otra cosa sería decir falsedades, pero este no es el caso.

Y el que dude, que coja su dinerito y vaya a comprobarlo, mira si es fácil, en vez de empozoñar y sembrar dudas, eso es lo fácil y lo miserable, y gratis claro