Partiendo de la limpieza y la higiene como base fundamental, el lijero olorcillo de un sobaco, y el calorcillo oloroso de un potorro, me pone de un burro que no veas. Mas infecto es el pestazo del tabaco, o esos perfumes que se te pegan como garrapatas, o el aliento a bocata de chorizo, sardinas, y ajo rancio, untado con gorgonzola.
He dicho