Gracias, ya sabes que si hay alguien que admira tus laberintos prosaicos ese ....ese soy yo.
Iniciado por icaro69
La grandeza de éste antiguo pequeño rincón Taoran, a pesar de que el charco se ha convertido casi en convento, es que sigue siendo un lugar tan tranquilo, como inquietante; tan sui generis, como humano.
Personas como tú, hacen que merezca la pena, siempre, cruzar el umbral.
Estarnos y sernos.
Sabernos.
La pincelada de azul, cada uno la extiende.... y la tiende.
Un fuerte abrazo.
Todas las personas nacen como original: la mayoría mueren como copia.