En un post tuyo en el apartado de E.T.S., facilitas una serie de datos sobre tus intimidades, que creo se contradicen con la privacidad que postulas.
¿Ya no es tan importante para tí, i?
Supongo que este post, si no es de tu agrado, también lo vas a borrar, igual que me has borrado el de Sir Winston.
Pues nada...olé tus cojones!!!
joder, vaya obsesiones........
esta esto lleno, si.
Parece ser que se a liado algo parda. Daré mi opinión, que por ello recalco, es mi opinión. La privacidad como bien dice, es privado. Entre personas nos podemos contar cosas que son intimas, que a nadie le importa o que no deberían entrometerse.
Igual que no me gusta que puedan desvelar cosas privadas mías (dícese, nombres, lugar de residencia, o confidencias si así fuera el caso) la otra persona también desea esa privacidad.
Existen personas que con un pequeño desliz, puede comentar en confianza cosas que pueden dañar a otras y también existen personas que lo airean sin importar el daño que ocasionen. Solo es mi opinión.
Deberíamos respetarnos, mutuamente y lo que uno no quiera para si mismo no hacérselo a nadie.
un besote
Mi experiencia como puta es que la privacidad se va degradando (para mí) según pasa el tiempo. Muchos clientes te hacen preguntas curiosonas, y a alguno le dejas ver un detalle de tu vida cotidiana. Como el puterío es en ocasiones un pueblo, (y más en los foros, ya sea por posts públicos o por intercambio de privados) al final te topas con que se han ido intercambiando piezas sueltas del puzle, y un chico concreto, o hasta una compañera te explica sin conocerte en que trabajas cuantos hijos tienes y si tienes perro o gato.
Alguno se ha empeñado en seguirme, acecharme a la entrada del apartamento o citarme sólo por la curiosidad de ver quien soy. Uno de mis últimos clientes me insistía "ingenuamente" en que le diese mi número privado por si no m localizaba en el profesional". Y hay quien insiste en conocerme en mi faceta profesional "formal" donde sea que trabaje porque le da morbo.
En contraste, los hay que se ofenden cuando desvías delicadamente la conversación o acabas cortando la curiosidad con más contundencia ante la insistencia ciega.
Algunos clientes tienen necesidad de hablar de sus vidas o hasta desahogarse con una. Creo que una de las virtudes exigibles a una puta es la confidencialidad absoluta.
Besos